• “Quien tiene sentimientos distintos camina voluntariamente al manicomio”(Así habló Zaratustra” Nietschze)

Pensá una palabra

te escuché, no solo no sos nadie, sino que también sos yo.

Parada la mentira

me mira desde lejos el pastito del camello de los reyes magos que encontré en el tacho de basura.

Suspiro ese aire a pileta pelopincho que tengo en el patio de mi casa.

Seguí durante años pintando esos cuadernitos de colorear, mientras a mi alrededor la casa cambiaba de dirección y aprendíamos un nuevo número de teléfono.

La soledad atraviesa las paredes del cuarto y se mete en mi placard, ahí se queda esperándome unos años.

Música! Música!
Razón de todo lo que encuentro de repente. Los cds que le robo a mi hermano,
él, mi primer profesor tácito! Niño prodigio de los Gangi´s,
te podría odiar pero sos música y solo música.
Doremi y Doremi, después los sostenidos y bemoles… y más y más!
Nuevo vocabulario de mundos,
incomparables con cualquier fantasia que pueda imaginar,
magía y deseo,
pasión y especie de viaje mental hacia un bosque lejano, tan tan lejano… Esas teclas por donde empiezo a caminar.

Terror se me dibuja en las piernas cuando me evalúan ellos con sus miradas,
Ellos, no saben nada, pero yo si.
Yo se que no está perfecto y no lo soporto, me quema y me deforma.
Insulto a la música, y caigo en un pozo de decepción empujada por Ellos.
Yo lo sé. Ellos.
Ellos,
Me escucharon.

Silencio

Sordina en las cuerdas cruzadas del piano negro… no! Negro no… ahora es marrón…
Ya se olvidaron.
Me rodea el pozo oscuro y húmedo. Hace calor acá adentro, pero sigo con mi amor.
Mi amor, amor amor amor… a una clave de sol que dirige la orquesta de la vida que intento tocar.

En silencio
Enmudecida
Aplausos transparentes
Son vida

Golpea la puerta una mitología que leí,
Trepó las paredes de mi conciencia y empapeló mi cabeza con dibujos de personajes hermosos.
Se asoma
Ahí está ella
La soledad envuelta en mis letras avergonzadas.

Un aura parece dibujarse en el reflejo de mi cuerpo,
Ese cuerpo… solo los ojos son míos.

Dibujos y dibujos de mujeres perdidas en tierras de carbón,
No tienen cara porque no la sé dibujar, siempre las cubre un velo, una sombra, o la nada.
Siempre igual.

No cambió más de dirección ni de teléfono mi casa aún,
pero mi celular me pide que corra y me escape.

Abrazo mi piano y recuerdo esas mujeres sin cara,
Solas y tristes,
como muertas y azules
Cae una rosa ( siempre cae una rosa, ¿porque? no se.)

No termino nunca de colorear mis dibujitos y vuelvo a intentar tocar la canción que me hace llorar.
Ella,
me arruina siempre todo pero es mi musa.
La tristeza, decepción y soledad. Invierno y miércoles.
(Humildad que se vuelve autoestima prendida fuego en un cajón.)

Solo Música, y música…música… (y no me sale) pero la amo.
Muda y falsa,
Tan falsa a través de mi, como las letras y las mujeres sin cara,
Como yo.
Como vos que no sos nadie.
Como éste olor a otoño… como éste olor a otoño…